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jueves, 17 de junio de 2010

Punteros sudamericanos


Francia y México venían de empatar sus partidos de la primera ronda: el equipo de Domenech no había hecho goles frente a Uruguay y el Rafa Márquez había logrado el empate a uno para los suyos, en los últimos 10 minutos contra Sudáfrica. Sin embargo, a pesar del 2-0 a favor del Tri, todos los seleccionados de este grupo tienen chances, aunque, si los sudamericanos empataran la próxima fecha, dejarían sin posibilidades al resto.
Durante la primera parte ambos equipos arrancaron bien parados y si bien el galo mostró algunos destellos, sobre todo en el juego rápido por las puntas, no logró vencer a una eficiente defensa comandada por Moreno y Rodriguez, que pocas veces salió jugando por abajo y buscó evitar complicaciones. Los verdes tuvieron 3 amonestaciones por faltas bastante tácticas y una por un innecesario empujón de Juarez que reaccionó ante la provocación de Malouda en el arranque de la segunda mitad.
En el inicio de juego Giovani dos Santos le pega adelantado desde afuera a una pelota que pega en el palo, unos minutos más tarde Vela también de lejos remata un metro arriba del travesaño y recién a los 26 aparece la primera oportunidad clara para el Tri: Salcido pica por la izquierda y queda solo frente a Lloris que, de rodillas y con los brazos en el centro del cuerpo, la atrapa y la envuelve.
Vela lucha una pelota con Toulalan, se estira de más y su isquiotibial derecho le dice basta, entra Barrera en su remplazo y a los pocos minutos tiene una chance de cabeza. A los 38, dos Santos, el hijo de Zizinho, la baja de pecho en el centro del área grande y cruza un derechazo que se escapa a media altura fuera de los palos.
Francia armó y tuvo la pelota pero genero pocas oportunidades claras. Un remate de Malouda y otro de Anelka, desde afuera y un intento individual de Ribery que terminó en tiro libre, él mismo lo tiró a la barrera, habilitó la contra y le costó una amarilla a Toulalan que salió a cortarla desde atrás y se pierde el próximo partido.
En el arranque del segundo tiempo la situación se mantuvo hasta que Aguirre hizo dos cambios, salieron Juárez y Franco que estaban amonestados y entraron Blanco y Hernández. Será este último quien dos minutos más tarde recibirá solo ante la mala salida de la línea francesa, eludirá al arquero Lloris que caerá rendido, y la volverá a tocar -ya sin nadie frente a él- para mandarla a descansar al centro de la red y darle la victoria parcial a su equipo.
A los 32 Barreda encara en el área, se zambulle antes de que lo toquen, el árbitro le cree y Abidal se lleva amarilla por un penal polémico. Blanco fusila besando la cara interna del palo izquierdo y sentencia el partido.
En toda la historia Francia no arriesgó, lo buscó tímidamente y pagó cara su apatía: para pasar deberá golear y dependerá de otros. México, en cambio, esperará al otro puntero del grupo con la tranquilidad de la tarea cumplida.

Figura del partido: Carlos Salcido, tal vez no sea indiscutible porque ninguno tuvo un brillo muy especial, pero si por algo lo ganó Mexico, fue por su entrega y su constancia y este lateral izquierdo estuvo conectado los 90 minutos, se fue al ataque sin perder las marcas y es un fiel exponente de esa característica.

Antifigura: Eric Abidal, sin contar la responsabilidad en el penal, fue una mala salida suya la que dejó solo a Hernández para el primero

Árbitro K. Al Ghamdi (KSA): 6 fue correcto aunque tampoco se le presentaron demasiadas situaciones complicadas y me queda la duda con el penal.

Calificación del partido: Sin demasiada emoción, intensidad de mayor a menor hasta los dos goles y se terminó de caer al final.

Demasiado verdes (Grecia 2 - Nigeria 1)


Tras la goleada de Argentina sobre Corea del Sur, Grecia y Nigeria tenían la posibilidad de buscar un triunfo para así acomodarse mejor en el grupo B. Lo de los helénicos ante los asiáticos había sido muy pobre, dándole así un poco de favoritismo a un Nigeria que sólo había perdido el partido “lógico” con Argentina.
El técnico de los griegos, Rehhagel, optó por realizar cuatros cambios para este partido, dejando de lado a su figura el delantero Charisteas. El esquema presentado fue de 4-3-3. Los nigerianos cambiaron dos jugadores respecto a su debut con Argentina y salieron con un 4-4-2.
Al comienzo del partido no había mucho para contar, con equipos que intentaban, pero no lograban acercarse a los arcos. Recién a los 15 minutos Nigeria consiguió un tiro libre por el sector izquierdo, algo cerca del área. Uche pateó un centro débil hacia el arco, posiblemente con la intención de encontrar a algún compañero. La pelota picó en el área chica y entró suavemente por la izquierda del arco, ante un Tzorvas que se vio sorprendido. Era un 1-0 para Nigeria sin tener grandes merecimientos.
En lo inmediato Grecia no logró reaccionar y un signo de su desconcierto se vio cuando su arquero, acompañando una pelota que se iba al saque de arco, puso sus manos antes de tiempo y regaló un corner. Poco iba a ocurrir hasta el fatídico minuto 32, cuando en un lateral para Grecia y, muy ingenuamente, un muy verde Kaita agredió a Torosidis con un empujón y una patada que permitió la simulación del griego. Ruiz sacó correctamente la roja y Nigeria se quedó con 10.
A partir de ahí, el partido cambió completamente. A los 36 ingresó Samaras en Grecia que se paró con tres delanteros. En ese tramo final iba a conseguir sus mejores chances, incluyendo una gran triangulación entre Karagounis, Katsouranis y Salpingidis, con la definición de este último. También Haruna salvó en la línea un remate de Samaras. El arquero nigeriano se iba transformando en figura, pero a los 43 Salpingidis recibió un pase atrás de Katsouranis, remató por derecha desde afuera del área, se desvió en Haruna y Enyeama no pudo hacer nada. La pelota entró por el palo derecho del arquero. Era el 1 a 1 y así se fueron a los vestuarios.
En el segundo tiempo, Grecia salió con la intención de atacar con sus tres puntas, mientras que Nigeria optó por defenderse y apostar a las contras de Yakubu, con la compañía de Uche. En la primera mitad Grecia, con sus propias limitaciones, tuvo varias ocasiones de gol, pero Enyeama estaba nuevamente muy inspirado y con sus atajadas era la gran figura de la cancha. Además, los delanteros africanos lograban aprovechar algunos contraataques y el partido parecía que se lo podía llevar cualquiera. Sin embargo, a los 25 minutos, tras un rebote de un corner, Tziolis pateó desde la puerta del área, Enyeama dio un rebote al medio y Torosidis definió por abajo, al palo derecho del arquero, para decretar el 2 a 1. A partir de ahí los helénicos lograron alejar el peligro de su arco buscando atacar y terminaron llevándose una histórica primera victoria en mundiales.
Con este resultado, Argentina no logró asegurar matemáticamente su clasificación a octavos y el segundo puesto quedó en suspenso. Nigeria pareció irse muy decepcionado por el resultado, aunque con un triunfo ante Corea se clasificaría en caso de que Argentina le ganara a Grecia. Los europeos festejaron mucho su victoria, a pesar de que sus chances de pasar de ronda parecen ser menores.


Figura del partido: Vassilios Torosidis. Dentro de un equipo griego sin grandes individualidades, el número 15 fue quien generó la expulsión de Kaita y luego anotó el segundo gol. Queda una mención para el arquero Enyeama que se atajó todo, pero falló en el gol de la derrota.

Antifigura: Sani Kaita. El volante nigeriano se llevó el premio al más verde del Mundial hasta ahora. Fue demasiado ingenuo, dejó con 10 a su equipo, siendo el principal responsable de la derrota.

Árbitro Oscar Ruiz (Colombia) 7: correcto manejo del partido y acertó en la expulsión de Keita. No hubo más polémicas así que quedó poco expuesto.

Calificación del partido: entretenido y emotivo. Con jugadores algo limitados, la expulsión cambió todo, hubo llegadas de los dos lados y en el 1 a 1 parecía que lo podía ganar cualquiera.

Dato de color: Grecia se sacó la mufa, convirtió su primer gol en un Mundial y consiguió su primer triunfo.

Polvo de estrellas


             Con el único cambio de Maxi Rodríguez por Verón (contracturado) y tratando de solidificar una línea de 4 más firme, Argentina salió a jugar su segundo partido en la Copa del Mundo con el objetivo de embolsar 3 puntitos más y acercarse a la clasificación. Del lado de enfrente, teníamos a los coreanos del sur que habían ganado en la primera fecha y venían perfilados con el rótulo del “rival más difícil del grupo”. Por presente y por historia (semifinalistas en el Mundial 2002 que co-organizaron con Japón). Aunque menos incisivo que contra Nigeria, el equipo de Diego arrancó cuidando la bocha, con buen traslado del esférico e insinuando gran desequilibrio de Tevez y Di María. Lio Messi arrancaba un poco más atrás, taponado por el mediocampo coreano, y le costaba entrar en juego. Sin embargo Argentina proponía fútbol por toda la cancha. Tanto apostaba por abajo que terminó consiguiendo la apertura del marcador por arriba. Aunque no de cabeza como contra Nigeria. Tiro de libre ejecutado desde la izquierda por Messi, Demichelis que no llega a cabecearla y el que se la lleva puesta con los tobillos es Park Chu-Young, el número 10 surcoreano. Gol en contra a los 16 minutos de partido. Gol a favor para la Selección. La mañana se encendía en Buenos Aires.
            Los goles propios te hacen recular o adquirís mayor confianza para ir por más. Esto último le pasó a la Argentina. Mientras Tévez estaba intratable, surgió un inconveniente. A Samuel le tiró jodido y en su lugar, tuvo que entrar Nico Burdisso, jugador reclamado por muchos en base a las deficiencias defensivas albicelestes. Aunque no se pensaba que tuviera que ingresar por El Muro de Milán. De parte de los coreanos, muy poquito. Un remate de Lee Chung-Yong que se fue lejos y un cabezazo que no intranquilizó a Romero. Nada más. Estaban todo el tiempo a la espera de lo que hiciera Argentina, aunque vale reconocerles un trato ciertamente apropiado de la Jabulani. Cuando apenas habían pasado dos minutos de la media hora, Messi le tocó cortito a Maxi Rodríguez un tiro libre y desde la izquierda, éste tiró un centro al área, Burdisso la peinó y un Higuaín solitario cabeceó a la red, sacándose la mufa nigeriana. Queda la duda de un off-side, pero para el cronista no estaba adelante. Muy fino Palacios, de todas maneras.
            Para el final del PT, tres incidencias para destacar, contrapuestas entre sí: 1) Tremenda tapada de Jung Sung-Ryong a Di María que le dio un zurdazo feroz al arco tras rebote de centro de Higuaín; 2) Notable jugada entre Tévez y Messi que éste define sutilmente desde el borde del área yéndose apenas afuera. Hubiera sido un golazo y bajábamos la persiana. 3) Una increíble distracción de Demichelis que deriva en la irrupción a pura velocidad de Lee Chung Yong (o Lechuzón para los que entienden únicamente castellano) en el área para definir sin inconvenientes frente a Romero y poner un insólito 1-2 en el último segundo del PT. Una señal de advertencia demasiado cruel.
            Me preparé un café, pelamos unas galletitas y nos dispusimos a observar la segunda parte. El grosero error de Micho – la foto de la crónica ilustra quién es la responsable de su baja performance – transmitió una sensación de nervios al equipo argentino que hizo pensar incipientemente en un doloroso escenario de empate. Pero Corea no es Brasil y Argentina, de cualquier modo, no se hundió en un pozo, sino que eran pequeños sobresaltos. El arquero surcoreano, aún con ese panorama de tensión, atajó dos pelotas muy buenas: a Higuaín dentro del área y a Tévez, que seguía picante y probó de afuera. Jonás se quedó sin partido ante Grecia por su segunda amarilla y el que también vio esa tarjeta fue Mascherano. Corea estaba un poco más adelantada en el campo de juego y la luminosidad de las estrellas argentinas se había apagado. Hasta que Diego metió un cambio que a muchos nos sorprendió en ese momento. Afuera Tévez, de tremenda actuación, premio Maradona hasta ese instante y adentro el Kun Agüero, hoy poco valorado por los hinchas. Dos minutos después de su ingreso, que había sido a los 29, corta una pelota, la cede para Messi que hace lo que quiere, encara hasta morir, remata, ataja el arquero, remata, pega en el palo y le queda servido el rebote a Higuaín que mete doblete y comienza a clausurar la ínfima ilusión coreana. A los 35, buena combinación de toques por la izquierda, Messi se la empala mágicamente a Agüero y éste envía un centro delicioso a la (Javi) sabiola de Higuaín, que se fuma en pipa su tercer tanto, igualando al gran Gabriel Omar. Enseguida, Diegote lo saca para que descanse y reciba el calor del público argentino y lo mete a Bolatti, el héroe de la clasificación argentina frente a Uruguay. Último cambio albiceleste y desde entonces correcta circulación de pelota hasta el final. Messi no pudo meter su gol (ya va a llegar Lionel), el Kun siguió firuleteando, Romero se tapó una bochita, de Bleeckere se llevó el silbato a la boca y a los 47 minutos le puso punto final al partido.
            Ganó Argentina y acaricia la clasificación. Muy buen nivel de algunos jugadores y la ilusión que parece tener sustento. Hay que seguir paso a paso. Lo que no podemos negar es que el 4 a 1 a Corea fue un polvo de estrellas. Y cómo le entramos a Evangelina.

Calificaciones

Romero 6 (Sólido. No tuvo responsabilidad en el gol)
Jonás Gutierrez 5 (Un poco más cómodo dada la ayuda de Maxi, pero aún así no termina de convencer)
Demichelis 3 (Error grosero en el gol coreano. Como creo en lo de las vuvuzelas, le levanto un puntito)
Samuel – (No califica. En su escaso tiempo de juego, casi no tuvo intervención)
Heinze 6 (Aunque cueste creerlo, el mejor de la defensa. Sin fisuras. Corte importante en el tercer gol)
Mascherano 7 (Más leoncito que nunca. Solvente en los quites y bancando la parada frente al perfil ofensivo de Argentina)
Maxi Rodríguez 6,5 (No hizo extrañar a Verón. Con eso, más que suficiente. Y eso que no lució)
Di María 7,5 (El caño que tiró en el PT garpa el puntaje. Buen recorrido por la banda. Así lo queremos al Fideo)
Tevez 8,5 (Notable. Potencia, velocidad, claridad conceptual. Rompe defensas. Cada vez más pueblo. Y más crack)
Messi 8 (Bastante obstaculizado al principio y excesivamente retrasado en el campo de juego. Pero cada vez que superó el vallado coreano generó un placer inmenso. Participación en los 4 goles, con gran protagonismo en tercero y cuarto. Casi clava una pepa hermosa)
Higuaín 10 (¿Se puede ponerle menos a alguien que clava 3 goles en un partido de Mundial? Por más que estuvo en gran parte desaparecido en acción y medio contenido, hizo lo que tenía que hacer: goles. Y no hizo uno, sino tricota, convirtiéndose en el goleador del Mundial hasta aquí)
Burdisso 5,5 (Ojalá hubiera entrado por Demichelis. Da confianza. Aún así entró frío)
Agüero 7,5 (Diegote nos cerró la boca. Entró por el excelso Apache y fue determinante en la liquidación del match. ¿Titular contra Grecia?)
(Bolatti no califica)

Premio “De qué planeta viniste”: Pipita Higuaín. Imposible no otorgarle este galardón a alguien que igualó lo realizado por Batistuta en otros mundiales. Que siga por esta senda.

Premio “Menos diez”: Demichelis. Si en cuartos de final se manda esa macana, nos volvemos a casa. No sé si sacarlo, pero no está en buen nivel.  

Premio “La tenemos adentro”: el cambio de Agüero por Tevez. Todos lo estábamos puteando a Diegote pero el Kun entró y la descosió en un pequeño ratito.

Juez: Fran de Bleeckere (Bélgica). En general estuvo correcto. Rápido para cobrar las infracciones cometidas por los coreanos. Amarillas justas para los argentinos. ¿Hubo off-side en el primer gol de Higuaín? El cronista piensa que no, que estaba en la misma línea que el defensor coreano. Si se equivoca, en todo caso el juez de línea es el responsable.

Dato de color: desde el 94 en adelante, excepto en 2002, Argentina la metió 4 veces o más en algún partido del Mundial respectivo: 4-0 a Grecia, 5-0 a Jamaica, 6-0 a Serbia y Montenegro y hoy 4-1 a Corea del Sur.
Dato de color penoso: llegamos a los 8 partidos invictos en Mundiales, récord histórico nuestro.