¿Final anticipada? (Portugal 0 - Costa de Marfil 0)

Llegaba la hora de abrir el grupo G y Costa de Marfil con Portugal generaban grandes expectativas. Si se partía de la hegemonía a la que nos acostumbra Brasil, estos dos equipos parecían jugar una final para definir quién acompañaría al scratch en la segunda ronda.
Los africanos presentaron un esquema 4-3-3, con Yaya Touré como el número 5 para sostener el medio y con tres atacantes (Gervinho, Dindane y Kalou), quedando en el banco su estrella, el herido Didier Drogba.
Los lusos salieron con el mismo esquema, buscando el fútbol de Deco como volante por derecha, con su estrella y capitán Cristiano Ronaldo de extremo derecho (igual que Eto´o en Camerún), acompañado de Danny y Liedson en ataque.
En el comienzo del partido se vieron dos equipos ordenados, de mayor categoría que muchos otros que se habían visto jugar en el Mundial. Parecía Portugal buscar un poco más, mientras Costa de Marfil esperaba, con sus delanteros extremos atrasados, buscando aprovechar las contras. La presión de los africanos era buena, aunque las recuperaciones de pelota no se tradujeran en jugadas de gol. Lo destacable es que los dos equipos intentaban jugar por abajo y no abusar de los pelotazos.
A los 10 minutos, Cristiano Ronaldo recibió la pelota en tres cuartos y, tras amagar, estrelló un tiro en el palo derecho de un arquero Barry estático. Eso iba a ser de lo poco que haría la millonaria estrella, que hasta intentó, sin éxito, mostrar algunos de sus lujos para las cámaras. También vio la amarilla a los 20 minutos luego de discutir con el central Zokora (también amonestado), tras una falta que no le habían cobrado.
Del lado de Costa de Marfil, hubo un buen manejo de pelota, pero únicamente tuvo un tiro libre que Tiené desvió por izquierda y un tiro algo por arriba del travesaño de Tioté tras una buena recuperación en el medio. Gervinho mostró su habilidad por izquierda en algunas jugadas, sin llegar a inquietar al arquero Eduardo.
En el segundo tiempo, los elefantes empezaron mejor, con un corner mal aprovechado y, luego, un centro de Dindane que no llegó a cabecear Kalou. De todas maneras, hubo poco, con un tiro de afuera del área de Kalou a las manos de Ricardo y, minutos después, un cabezazo de Liedson atajado por Barry, tras buen centro de Deco.
Entre los 15 y 20 minutos llegaron los primeros cambios, con Thiago reemplazando a Deco en Portugal y Drogba a Kalou en Costa de Marfil. A partir de ese momento, los europeos lograron acomodarse mejor en el partido y los africanos se fueron alejando del arco rival. Sin embargo, no hubo más que un tiro libre de Ronaldo por arriba del travesaño y el olor a 0 a 0 ya empezaba a ser insoportable.
Recién a los 45 apareció Drogba en el partido, de muy poca participación, con un buen desborde por izquierda y sin que ningún compañero suyo llegara por el medio a definir. En esos minutos finales Costa de Marfil estuvo cerca del área rival, con todo Portugal metido atrás. Hasta que en la última jugada, en vez de aprovechar su último corner, los africanos jugaron corto y Larrionda pidió la pelota para liberarnos de este bodrio.
Parecía una final anticipada de grupo, pero ninguno de los dos equipos jugó con esa idea. Prefirieron conservar el empate y ahora deberán pelearle a Brasil o esperar a sacar la mejor diferencia ante Corea del Norte, que en los papeles llega como un invitado de lujo.


Figura del partido: Vacante. Por momentos Yaya Touré controló bien el medio. En ataque Gervinho inquietó con algunas jugadas habilidosas, aunque intermitentes. Pero no hubo realmente una figura en mi opinión.

Antifigura: La Fifa que en su página oficial eligió como figura a Cristiano Ronaldo. No fue el peor jugador porque tuvo la más clara con su tiro al palo, pero se podía esperar mucho más de él.

Árbitro Jorge Larrionda (Uruguay) 5: sin gran influencia en un partido tranquilo. Omitió algunas faltas, otras las inventó. También faltó alguna amonestación, pero el manejo general fue aceptable.

Calificación del partido: Malo. Hubo peores, pero se esperaba mucho más.

Dato de color: Cristiano Ronaldo no cantó el himno de Portugal, estando con la cabeza agachada y los ojos cerrados. Incluso estaba parado al lado de un eufórico y emocionado Ricardo que casi gritaba su canción patria.