el partido entre Eslovaquia y Nueva Zelanda fue malo. A pesar de que los comentaristas de TyC lo jerarquizaban en el marco de los encuentros hasta aquí disputados en Sudafrica 2010, como partido de fóbal no fue bueno.
En los papeles, podría decirse que el equipo más fuerte de los dos era Eslovaquia (?), no tanto por méritos propios, sino porque ¿alguién se anima a decir, en un campeonato del mundo (que no sea de rugby), que Nueva Zelanda es el equipo que va de banca en un match?
Sin embargo empezó mejor parado que los eslovacos. De todas formas rápidamente se evidenciaría que su único argumento ofensivo era un tipo que tire un centro y un grandote que trate de impactar el mismo centro para mandarla adentro del arco. En ese sentido a los 4’ Killen fue el grandote que cabeceó y el golero eslovaco retuvo en dos tiempos. Menos de un minuto después, Weiss, de Eslovaquia, hijo del técnico, compañero de Carlitos en el City; en posición de 7 remató al arco y contuvo Paston, el golero neocelandés. La primer parte del PT dominó Nueva Zelanda pero sin crear situaciones de riesgo. Aunque a los 37’ tras una buena jugada, tuvieron las más clara del PT. De todas formas, ya para la segunda parte del PT se emparejó el partido en cuanto a dominio del balón. Es más la posesión de la jabulani a los 43’ del PT marcaba un “fifty fifty” como con el peronismo. Para destacar del PT, el bajo nivel del golero neocelandés: falló un par de veces en salidas por arriba y le pego mal en una jugada que podría haber capitalizado mejor el tim de Eslovaquia.
En el segundo tiempo, de arranque, golpeó Eslovaquia. Centro de Sestak y Vittek, en posición de 9, cabeceó y la mandó junto al palo: 1-0 Eslovaquia. A partir de allí los europeos se replegaron y cedieron en la inciativa. Pero claro, enfrente estaba Nueva Zelanda, un equipo pobrísimo, al que no se le cae una idea, que sólo sabe tirar centros; y que por lo tanto no pudo sacarle jugo a la posesión del balón (como le gusta a Pep) y a jugar en terreno rival (como le gusta a Bielsa). Así y todo, como Eslovaquia se conformó con el 1-0 y no fue por más... le pasó lo que suele suceder en estas ocasiones, te lo empatan sobre la hora y te quedás re manija. A los 92’ y como no podía ser de otra forma, Nueva Zelanda tiró un centro y Reid igualó el partido. Sabor amargo para los de Bratislava, alegría para los de Wellington.
Pasando en limpio, Nueva Zelanda no puede ganarle a nadie. A lo sumo le empata a un equipo con un cabezazo a los 92 minutos. Eslovaquia es más equipo, trata mejor el balón y tiene más variantes ofensivas que el tim de Oceanía.
Premio “de qué planeta viniste”... no sé si lo merece, pero el más firuletero (?) fue Weiss, el compañero de Carlitos.
Premio “menos diez”... el golero neocelandés, falló en un par de salidas por arriba y le pegó mal en una jugada que podría haber terminado mal para Nueva Zelanda.
Árbitro, Jerome Damon (Sudáfrica), localista, regular, podría haber sacado más amarillas ya que hubo patadas que lo ameritaban. El gol de Eslovaquia, para mi, no fue offside. Impongamos el criterio de “offside es un cuerpo de diferencia”, no pequeño margen que sólo ve el telebim.
En los papeles, podría decirse que el equipo más fuerte de los dos era Eslovaquia (?), no tanto por méritos propios, sino porque ¿alguién se anima a decir, en un campeonato del mundo (que no sea de rugby), que Nueva Zelanda es el equipo que va de banca en un match?
Sin embargo empezó mejor parado que los eslovacos. De todas formas rápidamente se evidenciaría que su único argumento ofensivo era un tipo que tire un centro y un grandote que trate de impactar el mismo centro para mandarla adentro del arco. En ese sentido a los 4’ Killen fue el grandote que cabeceó y el golero eslovaco retuvo en dos tiempos. Menos de un minuto después, Weiss, de Eslovaquia, hijo del técnico, compañero de Carlitos en el City; en posición de 7 remató al arco y contuvo Paston, el golero neocelandés. La primer parte del PT dominó Nueva Zelanda pero sin crear situaciones de riesgo. Aunque a los 37’ tras una buena jugada, tuvieron las más clara del PT. De todas formas, ya para la segunda parte del PT se emparejó el partido en cuanto a dominio del balón. Es más la posesión de la jabulani a los 43’ del PT marcaba un “fifty fifty” como con el peronismo. Para destacar del PT, el bajo nivel del golero neocelandés: falló un par de veces en salidas por arriba y le pego mal en una jugada que podría haber capitalizado mejor el tim de Eslovaquia.
En el segundo tiempo, de arranque, golpeó Eslovaquia. Centro de Sestak y Vittek, en posición de 9, cabeceó y la mandó junto al palo: 1-0 Eslovaquia. A partir de allí los europeos se replegaron y cedieron en la inciativa. Pero claro, enfrente estaba Nueva Zelanda, un equipo pobrísimo, al que no se le cae una idea, que sólo sabe tirar centros; y que por lo tanto no pudo sacarle jugo a la posesión del balón (como le gusta a Pep) y a jugar en terreno rival (como le gusta a Bielsa). Así y todo, como Eslovaquia se conformó con el 1-0 y no fue por más... le pasó lo que suele suceder en estas ocasiones, te lo empatan sobre la hora y te quedás re manija. A los 92’ y como no podía ser de otra forma, Nueva Zelanda tiró un centro y Reid igualó el partido. Sabor amargo para los de Bratislava, alegría para los de Wellington.
Pasando en limpio, Nueva Zelanda no puede ganarle a nadie. A lo sumo le empata a un equipo con un cabezazo a los 92 minutos. Eslovaquia es más equipo, trata mejor el balón y tiene más variantes ofensivas que el tim de Oceanía.
Premio “de qué planeta viniste”... no sé si lo merece, pero el más firuletero (?) fue Weiss, el compañero de Carlitos.
Premio “menos diez”... el golero neocelandés, falló en un par de salidas por arriba y le pegó mal en una jugada que podría haber terminado mal para Nueva Zelanda.
Árbitro, Jerome Damon (Sudáfrica), localista, regular, podría haber sacado más amarillas ya que hubo patadas que lo ameritaban. El gol de Eslovaquia, para mi, no fue offside. Impongamos el criterio de “offside es un cuerpo de diferencia”, no pequeño margen que sólo ve el telebim.
Que tristeza, yo pense que habia sido un gran segundo tiempo de futbol, con ocasiones y emociones y me vengo a enterar de que tambien fue un partido mediocre. De cualquier manera, vi el primer tiempo y conjuntamente un muy lindo gol. Gran jugada y lindo cabezaso. Gracias Ruben igualmente por ser tan sincero. Yo sabia que Nueva Zelanda tanto como Corea del Norte alguan sorpresita iban a dar.
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